Reseña | Grand Blue – Capítulo 7

lightbulb_outline ¡Advertencia! Esta reseña sobre Grand Blue capítulo siete contiene spoilers. Si aún no has visto el capítulo, te recomiendo que vayas a checarlo y después regreses a leer la reseña.

Dobles

Con la confianza de haber pasado su examen de recuperación, Iori y sus amigos deciden ir a beber. Aunque el verdadero objetivo es saber si Kouhei decía la verdad, acerca de que Iori y Chisa viven juntos. Todo parece ir bien, su secreto no ha sido expuesto, aunque algunos detalles escabrosos salen a la luz. Cuando parecía que era una prueba superada, Chisa aparece y arruina todo. Las actividades del club pueden ser costosas, así que cualquier oportunidad de ganar dinero es bienvenida. Esta ocasión se trata de un encuentro de dobles con el club de tenis. Si bien el objetivo del capitán de Tinkerbell era humillar a Iori y Kouhei, la realidad es que ellos por si mismos ya hacen un gran trabajo. Con un increíble espíritu anti-deportivo, el PAB se lleva la victoria. Pero las sorpresas no acaban, los senpais están organizando un campamento en Okinawa.

No hay peor ciego que el que no quiere ver

Nada es más triste que el negarse a ver la realidad. Los chicos de ingeniería están más que determinados a descubrir la verdadera naturaleza de la relación de Iori con Chisa. O bueno, al menos la mayoría de ellos lo está. Yamamoto nuevamente nos da cuerda para llamarlo “un verdadero idiota”. Este chico, que sabemos es el verdadero espíritu encarnado de “lo que sea es bueno”, ha decidido jugar a olvidarse de la realidad. Mientras los chicos están dispuestos a asesinar a Iori por haber encontrado un brasier y un labial en su habitación, Yamamoto prefiere huir de la realidad y pretender que son cualquier otra cosa. Aunque sí que se voló la barda, ¿un brasier como un sombrero? ¿Un labial como un supositorio? De verdad tenía muchas ganas de huir de la realidad este chico. Aunque no fue el único que prefirió ignorar algunas cosas.

Cuando las cosas comenzaron a ponerse extrañas, fue mejor darse la vuelta y pretender no haber visto nada. La tendencia travestis de Iori no era un tema que tuvieran deseo de tocar. Pasado el susto inicial, e ignorando la rareza, la tarde paso alegremente. Eso hasta que Yamamoto se topó con Nanaka y comenzó con sus alucines de virgen desesperado. Al igual que a Kouhei, me nació cierta curiosidad por conocer el pasado de Yamamoto cuando explico su forma de pedir una relación. Hacer un dogeza mientras suplicas, no me parece la forma más convencional de pedir un noviazgo, o en su caso que sean la madre de sus hijos. Pero bueno, la triste realidad es que nunca volvió a toparse con Nanaka, aunque sí que tuvo un encuentro con los senpais nudistas. Después de ese día algo dentro de Lotzo se quebró. Yamamoto será virgen de por vida.

Sin importar que truco sucio uses

La segunda mitad del episodio se dedicó al encuentro de dobles con el club de tenis. Y sinceramente, resulto en un encuentro bastante entretenido. Esencialmente porque el espíritu deportivo fue mandado a paseo y lo que reino fue la carroñería. No me malentiendan, a mí me encanta el espíritu deportivo, después de todo disfruto de los spokon. Sin embargo, y estarán de acuerdo conmigo, ese espíritu no es precisamente bienvenido en esta serie, no si no está relacionado al buceo. Pero ¿saben qué? Después de todo el espíritu carroñero queda muy bien en Iori y Kouhei. Ambos son unas mentes maestras para el mal, tienen una conexión milagrosa cuando de golpes bajos se trata. Les basto solo una mirada para entenderse y emborrachar a sus contrincantes. Sin duda estos chicos no se andan con medias tintas, saben hacer lo necesario con tal de ganar.

También es curioso, y gracioso, que Iori sabe cómo joder aunque no sea con mala intención. Esa porra a Chisa me acompañara un buen rato: ¡Chisa, nice body! En fin, quien resulto el héroe del día fue, nada más y nada menos, que Iori. Este chico es un gran deportista, excepto por la natación claro. La victoria pudo haber sido suya fácilmente, si no hubiese estado emparejado con el lastre de Kouhei. Este “otaku de closet abierto” no golpearía una pelota ni porque su vida dependiera de ello. Pero como ganar era prioridad, Kouhei le exigió hacer lo necesario con tal de llevarse la victoria. Todos sabemos lo que eso significa, ataques al cuerpo. Iori ni siquiera lo pensó, y como el gran deportista que ha demostrado ser, ataco al cuerpo. Solo que nunca especifico a que cuerpo, así se dio un K.O. para Kouhei. Fue la victoria del PAB.

Comentario final

No saben cómo reí con este episodio, el juego de dobles es una de mis partes favoritas del manga. Tal parece que este anime no tiene intención de ir suave con su comedia. Pero siendo sinceros es necesario aclara que no todo en sus chistes es bueno. Pueden pecar de exageración algunas ocasiones, pero ¿quién no lo ha hecho? En lo personal nada en los chistes, a veces repetitivos, ha llegado a cansarme. Después de todo, el humor simple y a veces malicioso es lo que más disfruto. No me juzguen, todo el que se ríe de las desgracias es igual a mí.

Dejando de lado el tema de la comedia, me quiero quejar nuevamente de Chisa. Ya sé, ya la traigo contra ella. Pero sinceramente me parece un personaje bien repelente, podría alguien decirme sus puntos buenos porque sinceramente yo no los hallo. Confieso que a mí me encantan los personajes tsundere, sin embargo ella ni siquiera consigue conquistarme con esta característica. Mi problema es solo con su personalidad, es decir que preferiría que ni siquiera apareciera. Bueno esa es toda mi queja, solo quería desahogarme.

Para ya cerrar esto quiero decirles: ¡ahora si se viene lo chido! Uno de mis arcos favoritos, si no es que el favorito, es el de Okinawa. Los desastres, malos entendidos y la cantidad de alcohol serán épicos. Yo ya estoy deseando por ello ¿y ustedes? Pero mientras esperamos lo que se viene, díganme ¿Qué les ha parecido el episodio? ¿Jugarían un juego de dobles contra el PAB? ¿Será que debemos comenzar a preocuparnos por las tendencias travestis de Iori o como Josh dice solo debemos gozarlo?