El pasado 31 de agosto, el Departamento de Policía de la Prefectura de Kanagawa en Japón detuvo a una mujer de 50 años que trabajaba a tiempo parcial en el barrio Shinyoshidahigashi de la ciudad de Yokohama, bajo la sospecha de malversación de fondos en las operaciones de un negocio.
Fue detenida como sospechosa de malversar un total de 26.93 millones de yenes (más de 245 mil dólares estadounidenses) en dinero por concepto de ventas en 697 ocasiones entre enero de 2015 y marzo de 2018 en una farmacia de dispensación en el mismo pabellón donde trabajaba como empleada de contabilidad. «Es verdad que malversé dinero, pero no tanto. Usaba el dinero para comprar cosméticos y prendas de lujo», declaró la mujer en la investigación. La policía está investigando si el dinero se utilizó para comprar otros artículos de marca o joyería.
Según la policía, la mujer estaba a cargo del proceso de pagos en ese momento. En repetidas ocasiones sacó dinero de la caja registradora al final de la jornada laboral. Para evitar la detección, se cree que los registros de ventas de la caja registradora fueron falsificados para que fueran menores de lo que realmente eran.
A principios de 2018, un supervisor empezó a sospechar de la diferencia de ventas entre los días que trabajaba la mujer y los demás días, e investigó el historial de funcionamiento de la caja registradora. Ahí se descubrieron las artimañas de la mujer. La mujer dimitió en marzo del mismo año. La farmacia presentó una denuncia penal ante la policía en octubre del mismo año y no fue sino hasta recientemente que se procesó. ¿Creías que la justicia en Japón era rápida?
Fuente: Kanagawa Shimbun.
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