Una de las series de anime más anticipadas del año finalmente ha aterrizado en Norteamérica esta semana, ofreciendo a los espectadores fuera de Japón la oportunidad de presenciar una tendencia emergente que difumina la realidad en el J-pop. “Girls Band Cry“, producido por Toei Animation, se estrenó originalmente en Japón durante la primavera pasada. La serie sigue a cinco jóvenes que forman una banda mientras enfrentan sus propios traumas y desafíos personales en el competitivo mundo del rock japonés.
Aunque la premisa de “chicas que forman una banda” es un tema común en el anime, ejemplificado por títulos como “K-On!”, “Girls Band Cry” se distingue por dos aspectos fundamentales: primero, el uso de animación 3D, una elección arriesgada pero que aquí ha sido ejecutada con maestría, otorgando a sus 13 episodios un estilo visual único. Y más importante aún, la serie se aleja de los clichés habituales del género al centrarse en las protagonistas que navegan por la vida después del instituto, permitiendo una exploración más realista de los problemas adultos en el mundo real.
El escritor Jukki Hanada, en una reciente entrevista con la revista Otaku Souken, comentó que “la vida no termina después de la graduación“, y la serie ofrece una exploración más fundamentada de músicos intentando encontrar su camino. Los fanáticos occidentales han estado ansiosos por poder ver la serie de manera oficial, y esta semana finalmente han obtenido esa oportunidad a través de la plataforma de streaming Hoopla, la cual trabaja en asociación con bibliotecas públicas para ofrecer acceso.
Para los seguidores más apasionados del anime, “Girls Band Cry” también representa una oportunidad para ver la última evolución de los proyectos de música de medios mixtos. El trabajo en la serie comenzó hace años con una audición para formar una banda real llamada Togenashi Togeari, que debutó en 2023, mucho antes del estreno del anime. Este grupo está compuesto por músicas reales que también prestan sus voces a los personajes del anime, añadiendo un nivel extra de autenticidad. Aunque las miembros de Togenashi Togeari representan a personajes animados, actúan como ellas mismas en los conciertos en vivo, algo que estarán haciendo frecuentemente en los próximos meses con presentaciones en solitario y en festivales como Baycamp en Kawasaki.
El cruce entre la animación y la música en vivo tiene una rica historia a nivel mundial, desde la serie animada de los Beatles hasta el tour “Coming Out Of Their Shells” de las Tortugas Ninja en los años 90. Sin embargo, en la mayoría de los casos, un lado del espectro artístico siempre ha predominado sobre el otro. Un ejemplo más cercano a lo que está haciendo Togenashi Togeari podría ser Gorillaz, la banda virtual creada por Damon Albarn y Jamie Hewlett. Aun así, ese proyecto trata el elemento animado más como un avatar, sin estar necesariamente vinculado a una historia o serie acompañante.
Durante la última década, la industria del entretenimiento japonesa ha estado perfeccionando cómo convertir a los grupos virtuales en una realidad. Franquicias de idols como “Love Live!” en los primeros años de 2010 ayudaron a sentar las bases de esta idea, con varios proyectos multimedia entrelazados culminando en presentaciones en vivo realizadas por actores de voz. Varios años después, “Hypnosis Mic: Division Rap Battle” aplicó un enfoque similar en una historia centrada en un Tokio futurista donde el hip-hop se convierte en la máxima arma. Junto con canciones originales, un manga y un anime, los talentos vocales detrás de “Hypnosis Mic” también realizan shows en vivo donde recrean el mundo para los fanáticos.
Sin embargo, el mayor avance en este ámbito llegó en 2016 con el debut del grupo masculino Strawberry Prince. Ese grupo utilizaba avatares de estilo anime para representarse, pero los miembros mostraban sus verdaderos rostros en los conciertos, a diferencia de los artistas en el mundo de las VTubers. Esto ha ayudado a Strawberry Prince a triunfar en múltiples campos, incluso asegurando un lugar en el programa musical televisivo “Kohaku Uta Gassen” el año pasado y lanzando una película animada este verano.
“Girls Band Cry” y Togenashi Togeari ofrecen un ejemplo de hacia dónde pueden ir los actos de medios mixtos japoneses. El proyecto combina dos elementos por los que Japón es conocido mundialmente: el anime y el rock. Mientras que el anime no necesita mucha explicación, el rock es un estilo musical que algunos escritores y fanáticos occidentales consideran que ha dejado de ser popular. Sin embargo, en Japón, el rock nunca ha dejado de ser relevante. Las cualidades sonoras del género son fundamentales en la nueva ola de J-pop que está ganando reconocimiento internacional.
Este aspecto de “regreso al rock” también juega un papel en la tendencia de las bandas nacidas del anime. Antes de Togenashi Togeari, ya existía Kessoku Band, el grupo central del popular manga y anime “Bocchi the Rock!”. Lo que comenzó como un grupo puramente animado se transformó en una banda real que sigue atrayendo a grandes multitudes en festivales y ha aparecido en el influyente canal de YouTube “The First Take”. El año pasado, “Bang Dream! It’s MyGo!!!!!” debutó, presentando otra banda de anime con equivalentes humanos. La banda epónima actuará junto con Togenashi Togeari en un show especial en enero, un posible punto de inflexión para los rockeros de medios mixtos.
Por ahora, “Girls Band Cry” presenta lo último en este estilo emergente, utilizando la autenticidad artística en conjunto con la construcción de mundos del anime para crear una experiencia que pocas otras industrias musicales han intentado. Esto refuerza el poder blando de Japón y podría ser una pista de hacia dónde podría dirigirse la música doméstica en el futuro.
Fuente: The Japan Times