Esta reseña sobre Himouto! Umaru-chan R contiene spoilers referentes a lo acontecido en el capítulo respectivo; por lo que se recomienda discreción.
¡La cartelera de otoño 2017 trae la segunda temporada de la increíble Himouto! Umaru-chan, la cual es una secuela directa de la primera temporada.
Si aún no has visto el capítulo puedes hacerlo ahora mismo por aquí.
Sinopsis
La historia sigue la vida de Taihei y su hermana menor Umaru, quien es bastante bella y le va bien tanto en el apartado académico como en los deportes. Pero este aparente perfecto personaje tiene un secreto.
Análisis del capítulo
Umaru-chan R ya ha llegado a la decena de capítulos y nos reunimos una vez más para revisar lo ocurrido y comentar lo más destacable esta semana.
Para comenzar, el capítulo abre con la buena dinámica entre UMR y Sylphyn, quienes están jugando en el arcade de siempre. Umaru acaba ganando muchos dulces y Sylphyn sugiere que los disfruten en su casa, lo cual es bastante peculiar, debido a que esta vez Sylphyn se notó bastante tímida a la hora de invitar a UMR.
En la casa de Sylphyn, se hace notar que en realidad ambas chicas comparten el mismo hábito de comer chatarra mientras ven anime y la serie nos destaca que en verdad es una actividad divertida, pero solitaria. Más tarde, se nos muestra cómo Sylphyn añora los recuerdos de una zona retro que solía visitar y Umaru acaba por llevarla ahí, donde se nos muestra que en verdad Sylphyn iba a Japón exclusivamente para ver a su hermano.
Es entonces que el anime nos lleva devuelta a una interacción Umaru-Hikari, pero esta vez se cuestiona acerca de la naturaleza de las visitas nocturnas de la chica. Resulta ser que Hikari escapa a escondidas los días en los que su hermana sale tarde, porque se siente sola y quiere ver a Taihei, a quien ama como a un hermano.
Umaru entonces muestra compasión por la chica y decide permitir que se quede más tiempo y no se muestra tan repulsiva a la idea de que regrese.
Hasta ahora, el capítulo nos ha vuelto a hacer énfasis en los temas de la soledad y la nostalgia, los cuales ya son habituales en la serie. Además, se ha ahondado más en el personaje de Sylphyn, quien parece cada vez menos ridícula y más profunda de lo que se conoce. De igual manera, las proyecciones que ha tenido Umaru con Sylphyn y Hikari hasta ahora nos demuestra cómo en verdad no se diferencia tanto de ellas y ha sufrido de los mismos problemas de soledad.
Continuando con el capítulo, se comenta que un examen está por venir y que las chicas deben prepararse. La problemática es que Ebina tiene terror a esta prueba, ya que le está yendo fatal últimamente. Las chicas acaban por reunirse a estudiar en la casa de Sylphyn y se nos demuestra que en verdad Ebina no es mala con los estudios, sino que durante las pruebas se estresa bastante y por ello sale mal.
Esto último seguramente genere empatía con muchas personas, ya que es un problema bastante habitual en los estudiantes, el tener los conocimientos, pero que el miedo y el estrés a la hora de calificarse estos acabe por dar un resultado negativo.
Finalmente, tras un rato y algunos consejos Ebina se siente impactada por la gran amabilidad que demuestran sus amigas y comienza a recordar el momento en que las conoció. El flashback mostrado muestra un recuerdo cálido del primer día de clases y en verdad, nos hace recordar cómo eran estas chicas durante la primera temporada de la serie, Kirie con su suma frialdad, Sylphyn con su rivalidad excesiva y Umaru con su aparente perfección.
Además de tocarnos el corazón con el recuerdo, la serie nos recuerda qué tanto han cambiado sus personajes y cómo contrastan sus yo anteriores con los de hoy en día. El capítulo acaba con una Ebina más tranquila realizando su prueba, recordando que tiene a sus amigas respaldándola.
Este capítulo fue bastante ligero ha servido más como capítulo de paso y relajación, Umaru parece estar aceptando cada vez más a Hikari y las chicas siguen reforzando la amistad que ya tienen. ¡Los esperamos la siguiente semana con la reseña del próximo episodio de Himouto! Umaru-chan R!