Esta reseña sobre Tonikaku Kawaii capítulo cuatro contiene spoilers. Si no quieres pasar un mal momento es mejor que veas este episodio y después disfrutes esta reseña.
Capítulo cuatro: Promesa
Tal como el capítulo anterior nos adelantó, nos acercamos más a Tsukasa pero no para desenvolver todo el misterio que la rodea; al contrario, hay más preguntas. La hermana no hermana de Tsukasa, Chitose, resultó ser más que un problema, la oportunidad para conocer el pasado de nuestra protagonista y su misteriosa relación con la luna y Nasa. Los planes de Chitose para separar a esta parejita sólo los lleva a una hermosa iglesia en donde somos testigos de la más hermosa reflexión sobre las relaciones de pareja y una bellísima petición de matrimonio acompañada del primer beso entre Tsukasa y Nasa.
Hermana
El comienzo de este cuarto episodio es maravilloso: La nieve va cubriendo la vida que se derramó fuera de mí. Como si no hubiera pasado nada, las marcas de mis pisadas se vuelven blancas, muy blancas… ¿Cuánto falta para que termine esta gélida noche? ¿Cuánto debo caminar llegar a un hogar con alguien esperándome. Estas palabras salen del corazón de Tsukasa mientras camina siguiendo la luna. La diferencia entre un hogar y un lugar en donde dormir es clara; el primero, es algo que construimos y al que pertenecemos, el segundo es sólo un sitio de paso en el que no hay tierra para echar raíces.
Tsukasa tenía un familia que la albergó, cuidaron de ella al punto de traerle un trozo de luna, justo un pedazo de su olor. Nada de estas cosas, ni siquiera el profundo amor, aunque egoísta, de Chitose logró llenar el deseo de Tsukasa. El hogar no es sólo un sitio, responde al deseo de pertenencia que los seres humanos sentimos después de mucho caminar. La familia es un concepto que se ha convertido en un fantasma y los matrimonios son sólo acuerdos vacíos. La promesa que le ha hecho Nasa a Tsukasa va más allá de lo que comúnmente creemos que es el hogar y el amor, se trata de un compromiso genuino de pertenencia, amistad, apoyo y amor incondicional.
“Tsukasita: Cuando algo bueno me pase, de ahora en adelante, serás la primera en saberlo. Si te pasa algo malo estaré ahí para compartir tu dolor. Compartiremos todo y nos apoyaremos. Esa es la clase de pareja que quiero que seamos. Nunca te arrepentirás de haberme escogido.” La propuesta de matrimonio de Nasa, tan espontanea y especial, nos hace testigo de la declaración más genuina y sincera de amor de esta temporada. La relación que Nasa tiene en mente no es la clase de relación aprensiva y dañina que normalmente desarrolla el entretenimiento. La pareja es un poyo y el hogar cálido al que vamos sin esperar reparos ni consuelos, sólo refugio y tranquilidad. Compartir no es sinónimo de cargar, y tampoco de descargar, es sólo aprender a comunicarse y sentir.
Conclusiones finales de Tonikaku Kawaii
Tonikaku Kawaii no es un simple anime cliché. Los conceptos de amor que desarrollan sus personajes revelan un historia humana, es decir, real y compleja. La fantasía con la que desarrolla su narrativa no impide que los sentimientos que provoca sean naturales y espontáneos. Hasta ahora el personaje de Tsukasa ha resultado ser todo un misterio y estoy segura que aportará toda la parte mágica que catapultará a este anime como uno de los favoritos de la temporada. Este capítulo nos ha dado alguna vista del pasado de nuestra fémina y comienza a existir una uniformidad en el anime.
Estamos a muy poco de llegar a la mitad y estoy segura de que terminaremos pidiendo una segunda temporada de esta historia. Nasa y su nombre, Tsukasa y su pasado, son dos engranes que nos regalarán una valiosa lección. El amor es el ingrediente principal de este anime, sin embargo, el romance no es lo único que le está dando sazón a Tonikaku Kawaii; lo que entendemos como felicidad y plenitud también esta en juego. No es sólo una historia de amor, es la historia de vida de dos personas que terminaron enamorados.