¡Advertencia! Esta reseña sobre Yahari Ore no Seishun Love Come wa Machigatteiru Kan (Oregairu 3) capítulo uno contiene spoilers. Si aún no has visto el episodio, te recomiendo que vayas a checarlo y después regreses a leer la reseña.
#1 Las estaciones cambian y la nieve se derrite
Oregairu 3 capítulo uno inicia donde nos dejó la temporada pasada, el tiempo para escuchar la petición de Yukinon ha llegado. Aquello que Yukino necesita del club de voluntariado es su compañía, ella ha decidido avanzar en lo que quiere hacer y lo único que desea es que Yui y Hachiman sean testigos de su camino, hasta el final. El primer paso será conversar con su hermana, lo demás seguirá después. Mientras tanto Hachiman continúa con su rutina a lado de su hermana quien se prepara para la última entrevista para su ingreso al instituto. Al esperarla se encuentra con Kawasaki y su hermanita Kei, compartiendo así la tarde con ellas hasta la llegada de Komachi. Finalmente ambos vuelven a su casa y comparten una emotiva charla sobre el agradecimiento de Komachi por haberla cuidado siempre.
5 años de espera
Después de años de espera, múltiples atrasos y miles de spoiler del final de su novela, finalmente ha llegado a nosotros la esperada conclusión para esta serie que con los años se ha ganado el aprecio de una multitud. Esta tercera temporada busca repetir el éxito de su predecesora conservando al mismo equipo de producción. Y con el primer capítulo ha demostrado que ciertamente mantiene la calidad que nos hizo enamorarnos de la historia de estos adolescentes.
Esta temporada se ha hecho esperar, quizás muchos hicieron su maratón para esperar este estreno, otros posiblemente decidieron confiar en su memoria. Cualquiera que sea el caso, no estaría de más darnos un pequeño repaso para situarnos en lo presentado en este capítulo. Dejando un tanto atrás lo que ocurre en la primera temporada, la segunda nos sitúa en un escenario más dramático, un drama cotidiano eso sí. Las relaciones dentro del club de voluntariado se tensan cuando Hachiman continua “sacrificándose” a sí mismo para cumplir con las peticiones. Pero como acostumbramos en esta historia, es a través de la comunicación que buscan arreglar el conflicto. Son sus encuentros verbales los que los llevan a un punto de reflexión y búsqueda, lo que persiguen es “lo verdadero”. Pero para poder llegar a ello cada uno debe dar un paso al frente y perseguir lo que quieren, enfrentar sus debilidades y todo ello lidiando con los sentimientos que nacen entre ellos.
Es un panorama muy superficial pero a grandes rasgos es lo que hemos visto hasta ahora. Pero como el mismo título nos lo anuncia, es tiempo de entrar al verdadero clímax de esta historia. Esta será una temporada de doce episodios en los que se buscara narrar los últimos tres volúmenes de la novela ligera, dando así por concluida esta historia. Y lo único que puedo decir es, tras tantos años de espera realmente estoy anticipando porque este sea un cierre digno para esta serie.
Lo que Yukinon desea
Ahora sí, demos inicio a lo que el capítulo nos dejó. Como dije antes, la historia retoma su narrativa desde donde la temporada anterior nos dejó. A lo largo de varios episodios en la segunda temporada pudimos ver como Yukinon estaba luchando consigo misma, sin embargo no terminaba de compartir sus sentimientos. En este inicio finalmente pudimos conocer “la petición” de Yukino. Pero más que la petición en si misma lo que vale la pena recoger es el contexto de dicho pedido. Yukinon creció en una familia acomodada, como la hija menor nunca fue realmente considerada para la sucesión del trabajo familiar, sin embargo esto es algo que ella llego a desear. Con el tiempo, esa perspectiva le fue arrebatada y en su lugar le dieron “libertad”. El problema recae en que esa “libertad” es una cosa a medias, que lo único que consiguió fue confundir a Yukino ya que el único camino que había seleccionado le fue arrebatado.
Ahora que Yukinon ha puesto en palabras su deseo, también fijo su propia rendición. El camino que ha elegido es el de seguir sus deseos a sabiendas que estos no se cumplirán, pero ella desea pasar por si misma ese proceso. Dentro de ella existe la necesidad de esforzarse y decepcionarse, pero necesita hacerlo ella misma, no a través de otros. Solo haciendo esto ella podrá avanzar realmente, esto será lo que marque su verdadero punto de partida. Finalmente podrá dejar su incertidumbre y levantarse con sus propios pies, en lugar de depender de otros. Es por ello que su petición no fue para que le ayudaran, ella ya no quiere depender de los demás pero no puede desviar sus emociones, aun quiere apoyarse en sus amigos, por eso su solicitud es para que la acompañen en su travesía hacia su propia madurez.
Hachiman siempre será Hachiman
Yukino se lleva toda la primera mitad del episodio, pero la segunda se la dedicaron a Hachiman. No nos sumergimos en profundas reflexiones y tampoco vimos en todo su esplendor su bien conocido cinismo ante la vida. Pero eso no quiere decir que no viéramos al Hachiman que todos conocemos y amamos. Para esta segunda mitad acompañamos al hermano mayor, incluso durante su encuentro con Kawasaki. El bien conocido complejo de hermana de Hachiman se lució en este capítulo, entre remates y bellos momentos cotidianos, me hace pensar en lo mucho que había extrañado la relación de estos hermanos.
El encuentro con Kawasaki solo resalto el papel de hermano mayor que Hachiman siempre ha desempeñado perfectamente. Aunque en cierto modo también nos hace despertar el ship entre Hachiman y Saki. Toda la escena de ambos cuidando y malcriando a Kei en la cafetería nos hace pensar en una pareja de casados con su primer hijo. Y aunque el anime se ha comido algunos grandes momentos de Saki, al menos nos regalaron ese guiño al pasado donde Hachiman sin pensarlo demasiado soltó una bomba que descoloco a la siempre seria Kawasaki.
Sí, fue una segunda mitad muy enfocada al papel familiar de Hachiman, así que es demasiado pronto para pensar que la personalidad de Hikki ha cambiado. Después de todo él siempre ha sido alguien suave para su familia, y bastante más arisco para el resto del mundo. Esperemos a verlo de nuevo en la escuela y el club para ver si realmente ha cambiado su cinismo o no.
Temporada de cambios
Cerremos esto con el momento emotivo de la semana, el agradecimiento de Komachi. La vida no es en línea recta, está llena de altas y bajas, así como las estaciones cambian también lo hacen los sentimientos y las circunstancias de la vida. Así como Yukino, Yui y Hachiman están comenzando a cambiar, Komachi también está atravesando su propia temporada de cambios. En su caso se trata de un momento de transición, una nueva etapa de su vida está por iniciar, lo que significa que está dejando atrás una parte de su vida. El salto al instituto puede significar mucho, es una señal de crecimiento aunque al mismo tiempo no cambia tan drásticamente todo. Es un tiempo delicado porque se despide de su etapa infantil pero sin abandonar el nido.
Komachi es muy apegada a su hermano, la prolongada ausencia de sus padres la ha hecho inevitablemente apegada a él. Ciertamente mucho de lo que Komachi ha logrado y es, se lo debe a su hermano, él ha sido quien ha velado por ella. Nada de esto es ignorado ni obviado por ella, siente verdadero agradecimiento hacia él. Es por eso que decide expresárselo, ¿Por qué ahora? Porque era el mejor momento para ello, porque es tiempo de cambiar, ella ya no es una niña que deba cuidar, de hecho ahora es ella quien puede cuidar de él. Con este agradecimiento no busca graduarse de ser la adorada hermana pequeña, simplemente es su forma de expresar que valora el cuidado que su hermano le ha dado y ahora quiere dejar de ser mimada y volverse un apoyo, alguien con quien se pueda contar.
Comentario final
Oregairu 3 capítulo uno ha sido un excelente inicio para este camino final. Fue una narrativa bastante amable para iniciar esta temporada. Lo mejor de todo fue comprobar que aun después de cinco años la magia que nos acercó a esta serie continúa ahí. Como dije, este inicio conto con una narrativa bastante amable así que no profundizaron enormemente con las reflexiones a las que nos tenían acostumbrados, pero eso no significa que las hayan olvidado. El tema de la petición de Yukinon es algo que todavía debemos ver como evoluciona, y lentamente nos han dejado pequeños guiños en los sentimientos complicados que revolotean entre los tres integrantes del club de voluntariado.
Antes de cerrar con esto hablemos del opening y ending. El tema de apertura es “Megumi no Ame” de Nagi Yanagi, su estilo no se despega de los anteriores aunque quizás cuenta con una nota más triste, ideal para el drama que el visual nos parece augurar. En cuanto al tema de cierre, tenemos “Diamond no Jundo” interpretado por Saori Hayami y Nao Touyama, las seiyuus de Yukinon y Yui respectivamente. Este cuenta con un tono más pegadizo, ofrece una sensación de esperanza y rendición en la misma medida, es difícil de explicar. Necesito más tiempo para digerirlo mejor.
En fin estas han sido mis impresione de este capítulo: ¿Qué les pareció el episodio a ustedes? ¿Valió la espera de tantos años? ¿Cuál fue su impresión de este inicio rumbo al final de esta historia? ¿Cómo esperan que se desarrolle la petición de Yukinon desde ahora? ¿Por qué creen que Hachiman guardo las galleta que le dio Yui? A mí me suena a que más de uno está vacilando en sus sentimientos y cómo encararlos. ¿Es el agradecimiento algo que solo debeos demostrar ante una perspectiva de final, o es algo que siempre debemos expresar?
