Esta reseña, por supuesto, contiene spoilers sobre el episodio
Resumen del capítulo:
Un extraño se encuentra en una celda mientras parece jugar una especie de ajedrez llamado chells, cuando una chica irrumpe con su comida; ella parece un poco interesada en su juego y en la capacidad que posee el desconocido al recordar cada jugada de un viejo partido. El extraño se presenta como Remedius, un vizconde del Imperio Dragón. Después del opening vemos a Gayus y Jiv en un juego de roles pero antes de poder continuar suena el teléfono de Gayus; mientras esta en un auto con Gigina reciben una llamada de su jefe sobre una situación que requiere su apoyo, una abominación. Cuando ambos llegan al lugar se internan en el edificio donde está la criatura y allí ven cuerpos de personas destrozados mientras continúan avanzando; cuando llegan a una gran sala descubren que la criatura es un Magatsushiki, una especie de cerebro con extremidades.
Empiezan a combatir y aunque el Magatsushiki posee varios Jushiki, nuestros protagonistas logran atraerlo hacia el exterior donde tienen una mejor movilidad; Gayus lo ataca con su Jushiki de rayos para que Gigina pueda cortar el cerebro a la mitad de un solo golpe. Ambos se relajan y un tentáculo del Magatsushiki atrapa a Gayus, pero antes de que pueda atacarlo un objeto volador corta la extremidad y vuelve a su dueño. Un hombre con un hacha se encuentra en la cima del edificio hablando a toda voz, cuando baja Gigina le apunta con su espada y sabemos el nombre del desconocido, Largonkin. Volvemos a ver a Remedius, ahora la chica juega con él al chells mientras habla sobre su país, Urmun; al parecer un lugar lleno de muerte y desolación.
Gayus visita a Gigina mientras este último está construyendo una silla a la vez que habla sobre sus cualidades sobre las de Gayus, este le responde lanzándole un libro que Gigina esquiva pero impacta contra una silla y termina rompiéndola. Gigina ataca a Gayus sin dudar y cuando logra quitarle su espada para darle el golpe final Jiv irrumpe en la discusión y calma la situación. Gayus recibe a sus clientes, una señora mayor perteneciente a una gran empresa que busca contratarlos como guardaespaldas en un intercambio de un prisionero por una gran cantidad de dinero; el rehén resulta ser Remedius, quien también es el tío de la señora. Antes del final conocemos dos nuevos personajes que observan la ciudad desde las alturas, uno esta disfrazado como un bufón y el otro viste una armadura, el bufón habla sobre que es tiempo de abrir el telón y de comenzar esta la obra sangrienta en la ciudad de Eridana.
Opinión:
Hemos entrado en una nueva trama, y aunque eso me parece bien para no seguir con el cardenal Mouldeen, aún siguen sin explicar nada; no estoy pidiendo dos o tres capítulos de clases sobre los Jushiki, solo uno como mucho donde se habla más acerca de esta tecnología que parece magia. Podrían explicar donde se aprenden, como se aprenden, porque necesitan armas para utilizarlas, su división en categorías si es que tienen; cosas básicas para comprender más a fondo a los Jushiki, de otra forma la sinopsis del anime queda desacreditada ya que apenas se nos dijo algo en los primer minutos del capítulo uno sobre ecuaciones y esas cosas.
Reconozco que aunque lo anterior me parece un pequeño fallo, no tengo muchas más quejas sobre el anime; también hay que reconocer que tampoco destaca por algo en particular; de esta forma se podría clasificar este anime como uno más de la temporada que si bien no es malo tampoco es uno de los primeros que recomendaríamos a ver comparado con otras joyas de esta temporada.
En cuanto al capítulo en sí, se nos sigue mostrando a Gayus como si fuera el protagonista al verlo con Jiv o con sus conocidos en el puesto de comida donde siempre se detiene; aunque en este episodio pudimos ver que a Gigina no solo le gusta comprar muebles, sino que también los fabrica. Siguiendo este hilo podríamos pensar que solo conoceremos esta faceta de Gigina, descubriendo poco a poco el origen de su fascinación hacia los muebles en cada capítulo, dejando atrás una posible buena historia sobre el pasado de este personaje tan peculiar. Otro aspecto que reconozco tiene cierta importancia, es la aparición de Largonkin; hasta el momento apenas conocíamos a dos Jushikistas Ofensivos únicamente, pese a que todos parecen usar los Jushiki para distintas tareas. Me pareció un poco extraño que en una ciudad entera no viéramos otros Jushikistas, salvo los que mato Nidvork claro, realizando algunos trabajos o que nuestros protagonistas apenas los nombraran.
Como bien dije al principio de esta opinión ha empezado una nueva trama, y con ella nuevos personajes llegan a la ciudad de Eridana; entre ellos se encuentran la señora Calpunia Levvinakes Rahzel, su guardaespaldas Eggurd Lasgrissid y el tío de Calpunia, Remedius Levvi Rahzel. Todos estos nuevos personajes de seguro traerán consigo muchos problemas para Gayus y Gigina dado el trabajo para el cual se los ha contratado; el cual es asegurar el rescate de Remedius.
Es casi seguro que algo saldrá mal en ese intercambio del rehén por dinero, sino nuestros protagonistas no tendrían nada que hacer allí; si no fuera por los planes y maquinaciones de Mouldeen podríamos decir que el mundo gira alrededor de Gayus y Gigina ya que no parece ocurrir nada si no están ellos presentes. Pero además, también tenemos la misteriosa aparición del bufón y el hombre de armadura; figuras enigmáticas de los no sabemos nada, ni siquiera cuál es su plan; pero seguramente no sea para nada bueno viniendo de gente tan particular a la hora de escoger su vestimenta.
Para finalizar solo puedo decir que este anime si bien no me ha decepcionado, no está cumpliendo con lo que personalmente esperaba de él; no es malo ya que se entiende muy bien y sigue este accionar casi episódico donde las pequeñas tramas empiezan y terminan dando un cierra a determinada situación. Pero estoy casi seguro que podría haber sido mucho mejor si hubiera tenido otro desarrollo, ya que su animación y banda sonora las considero a la altura de un anime decente, pero tendremos que conformarnos con lo que tenemos; sin más que decir me despido hasta la próxima reseña.
