Esta reseña sobre Gotoubun no Hanayome 2 contiene spoilers. Si no has visto los capítulos, te recomendamos hacerlo y después regresar a leer la reseña.
Gotoubun no Hanayome 2 – Capítulo final: Guerra de hermanas (Segunda parte)
Ichika, disfrazada como Miku, logra tener tiempo a solas con Futaro. Hablando con él sobre lo ocurrido hace años cuando aún eran niños, lo que recordaba perfectamente Futaro ya que involucraba el tiempo que pasó con Rena. Sin embargo, Futaro ya sabía que era Ichika disfrazada de Miku con quien estaba hablando. Y solo lo estaba haciendo para saber qué tramaba. Con una fuerte lluvia cayendo sobre ellos, Futaro deja a Ichika atrás en ese lugar.
Al día siguiente, siendo el último día de la excursión, habría excursiones optativas, por las que cada uno decidiría a qué grupo unirse. Es por eso que las quintillizas habían decidido tomar caminos diferentes, para que solo exista una pequeña posibilidad de encontrarse con Futaro en el mismo grupo. Dejándolo a la suerte, Miku termina en el mismo grupo de Futaro. Aunque no puede verlo a la cara, evitándolo cada vez que puede. No obstante, Ichika y Nino dejan excusas en sus grupos para poder vigilar el avance de Miku. Algo que también hicieron Yotsuba e Itsuki. Apoyando a Miku desde las sombras y alejando a Maeda y Takeda paraa que Miku se quede a solas con Futaro durante el recorrido.
Todo va muy bien durante el día, pues Miku comenzó a hablar con normalidad con Futaro nuevamente. Ambos terminan descansando un rato, en el cual Futaro prueba el pan que Miku había hecho. Luego de probarlo, Futaro le habla un poco sobre su madre, algo que entusiasma a Miku ya que nunca había podido conocerlo bien por su falta de determinación. Del mismo modo que ella quiere que Futaro la conozca mejor.
Opinión de Gotoubun no Hanayome 2 – Capítulo final
El final de la ‘Guerra de hermanas‘ ha llegado, y con ello el también el final de esta segunda temporada. No importa cuánto tiempo pase ni qué serie sea, siempre me queda una vacío existencial cuando el último episodio de la temporada es uno que estuve ansioso por ver para saber cómo se desarrollaría la trama a como se había quedado en el capítulo anterior. Y esta no fue la excepción. Especialmente por el drama que había cargado el episodio pasado.
Con eso dicho, puedo confirmar que Gotoubun no Hanayome 2 – Capítulo final es mi episodio favorito de toda esta segunda temporada. No voy a negar que en parte lo sea por la gran cantidad de tiempo que tuvo Miku en pantalla y todas las expresiones faciales que hizo. Sin embargo, el motivo principal es porque todos los personajes tuvieron un momento de desarrollo, especialmente las quintillizas implicadas en esta guerra: Ichika, Nino y Miku.
Ichika aceptó su error e intentó enmendarlo, incluso a pesar del daño que ocasionó y el que la persona que ama le haya perdido la confianza. Nino entendió lo aterrador que puede ser estar enamorada al percatarse que ella pudo haber cambiado de lugares con Ichika si las cosas hubieran sido un poco diferentes. Miku reconoció que ella era la culpable de su relación actual con Futaro, posponiendo constantemente los avances que pudo haber tenido con él.
Eso sí, mi escena favorita sin lugar a dudas es la confesión de Miku. Una en la cual Han Solo estaría orgulloso de la respuesta de Fuatro. No obstante, me dejó con sentimientos encontrados. Primero que nada, el solo ver ese momento hizo que mi corazón se acelerara y soltara un grito de emoción por verlo luego de tanto tiempo esperando. Pero, el que Miku cambiara su “objetivo” al apuntar para revelar a su hermana me dio un bajón emotivo en picada. Sin embargo, el verla burlarse de Futaro por hbaer pensado que él era el objetivo volvió a hacer latir mi corazón. En cuestión de segundos pasé por un subibaja de emociones bastante interesante. Algo que honestamente no creo pueda enfrentar de encontrarme en una situación similar. Mi cerebro terminaría con una temible pantalla azul al no saber cómo reaccionar.
Por supuesto aún me quedan algunas incógnitas en el capítulo, como el por qué Itsuki tenía esa ropa interior (desde el hecho de haberla comprado, hasta el tenerla en el momento oportuno para dárse la Miku). También hizo que me emocionara, aunque en un sentido diferente al que hizo la confesión o el ver a Miku con vestimenta de época.
Listones y mentiras
A diferencia de la primera temporada, Gotoubun no Hanayome 2 mostró un desarrollo en muchos más personajes. Los más notorios fueron Ichika y Nino por sus acciones al saber sobre sus sentimientos. Futaro también tuvo un desarrollo al separarse de Rena y su pasado. Mientras que Miku terminó de asentar las bases del desarrollo que ya había mostrado en la primera temporada.
Yotsuba e Itsuki también tuvieron su desarrollo, aunque no fue tan grande como el de sus hermanas. Yotsuba mostró su deseo egoísta de querer hacer a sus hermanas felices, luego de sentirse como una carga para ellas. Mientras que Itsuki decidió su futuro en busca de ser una maestra. Este poco desarrollo es similar al que tuvieran Ichika y Nino en la primera temporada, un pequeño pero que estableció el avance de la trama hasta este momento, desde el cambio de Nino al percatarse de sus sentimientos, hasta el arrepentimiento y desesperación de Ichika al intentar quedarse con Futaro.
No obstante, hay un punto clave con Yotsuba que creo no mostró su potencial. El que ella fue a quien Futaro conoció en Kioto cuando eran niños. Ella era la “Rena” de ese entonces. Como mencioné, existe la posibilidad de que todo lo relevante con Rena y Yotsuba en Gotoubun no Hanayome 2 apenas sea la punta del iceberg, lo cierto es que no sentí que le tuviera tanto impacto como lo tuvo en el manga. Algo que quizás se deba al cambio en las situaciones en la adaptación animada a comparación de la obra original.
Los cambios en cuanto a la trama en la adaptación no son muy significativos en general. Algunas escenas fueron omitidas o alteradas, pero mantuvieron bastante bien la esencia principal de la trama. Sin embargo, esos ligeros cambios siento que terminaron afectando un poco el desarrollo de los personajes, especialmente de aquellos que no cumplían un papel protagonista en la serie (como Maeda y Takeda). Además de apresurar la revelación de la identidad de “Rena”.
Me esforcé mucho
Desde el principio de Gotoubun no Hanayome 2 lo que más me preocupaba de esta temporada era la animación. Ya que se había cambiado de estudio de animación e incluso antes de estrenarse ya tenía controversia debido al grosor de las piernas de las quintillizas. Al igual que muchos, yo también era de los que veía demasiado delgadas esas piernas, comparándolas con las de la primera temporada o el manga. Sin embargo, con el avance de los capítulos terminé adaptándome al este nuevo estilo de animación y diseño de los personajes. Personalmente, el diseño de la animación no me pareció malo, pero tampoco siento que sea más fiel al diseño del manga.
Pero, como la materia, mi preocupación sobre la animación no desapareció, solo se transformó. Esto debido a las altas expectativas que tenía en cuanto a la calidad de la misma. Después de todo, esta secuela ya tenía su tiempo de haber sido anunciada e incluso fue atrasado su estreno en más de una ocasión (por diferentes motivos). Sin embargo, la calidad general era apenas aceptable en la mayoria de escenas. Solo me pareció “mala” en aquellas escenas y momentos en los que directamente hay errores notirios en la animación, como lo sería desproporción en los personajes. Algo que ocurrió muy pocas veces, pero que ocurrió.
La calidad de las expresiones faciales me fascinó en la gran mayoría de ocasiones, habiendo muy pocas excepciones. Los escenarios tenían una calidad variable en cuanto a calidad, algunas mostraban un gran desempeño, mientras que otras parecían estar hechas con “prisa”. Algo que quizás fue mi percepción debido a la iluminación de la escena, pues, por ejemplo, en Gotoubun no Hanayome 2 – Capítulo final en el momento en el que habla Futaro sobre su madre la escena solo enfoca el marco de madera. Me encantó la calidad de animación de ese corto momento. Calidad que era la que esperaba ver en Gotoubun no Hanayome 2 desde un inicio.
Pero, el mayor problema que creo tuvo Gotoubun no Hanayome 2 con respecto a la animación creo que fue toda la involucrada con movimientos. No tenían buena fluidez, parecían movimientos ‘robóticos’. Además de que era en esas escenas donde me parecía más baja la calidad de la animación.
Eso sí, todas las escenas de fanservice tuvieron una excelente calidad de animación. Algo que agradezco completamente. Incluso aunque pudieran tener una hipotética y ligera censura.
Bibury Animation Studios es un estudio relativamente nuevo, con pocos proyectos en los que ha participado. Por lo que tampoco esperaba de ellos una calidad que pudiera competir contra los grandes estudios de animación. Pero, el estudio ya tenía historial sobre “retrasos”, pues este estudio fue el encargado del anime de Azur Lane en 2019. Para aquellos que no la vieron, es suficiente con decir que los últimos dos capítulos de la temporada se atrasaron casi 3 meses en salir. Técnicamente una temporada completa.
Fue un honor
Pese a los altibajos que tuvo Gotoubun no Hanayome 2, no me pareció que fuera una mala adaptación. La trama se mantuvo bastante fiel, con solo algunos ligeros cambios. Los personajes mostraron un gran desarrollo, aunque dependía de la importancia que tuviera en la historia de los arcos adaptados. La animación no fue lo que esperaba, pero no fue una completa decepción. El apartado sonoro fue bastante bueno, aunque había momentos en los que el volumen no era el adecuado o simplemente no estaba correctamente sincronizado con la escena en cuestión. Nada muy alarmante. Es por eso que ha Gotoubun no Hanayome 2 le doy una calificación de 7.5/10. El cual se redondearía hacia arriba en caso de ser necesario.
No fue una mala adaptación, sin embargo, la calidad de animación tiene un papel importante para mí en este caso. Después de todo, fue un largo tiempo de espera desde el anuncio sobre la producción de esta segunda temporada, y aún más con los retrasos en su estreno. Además de que en ese entonces no había problemas ocasionados por la pandemia mundial, por lo menos no hasta meses después del anuncio. No cumplieron mis expectativas acumuladas con el tiempo, pero tampoco fue nada mala la serie. La animación no decayó brutalmente de un episodio a otro, mantuvo un mínimo aceptable en casi toda la adaptación.
El cambio de estudio y por consecuente de estilo en los diseños y la animación, tampoco fue algo imperdonable. Habrá quienes vean este estilo más similar al del manga. Pero para mí no lo es, así como los diseños de la primera temporada tampoco lo son. Un equilibrio entre ambos estilos sería la perfección. El “problema” de las piernas de las quintillizas era bastante insignificante y se perdió su poca importancia con el paso de los primeros episodios.
Además de que estoy agradecido hayan anunciado ya una tercera temporada y no terminaran de forma prematura la historia. Por ejemplo, un final en el que aceptara la confesión de Miku. Incluso aunque se quedara con mi quintilliza favorita, no me sentiría satisfecho con ese final tan abrupto para cerrar la temporada..
Si bien me encantaría ver finales alternos con todas las quintillizas protagonizando el suyo, la verdad es que prefiero se mantenga el mismo final que en el manga. Ya que no creo haya sido uno malo. De hecho, aunque mi favorita es Miku, hasta donde se quedó la trama en Gotoubun no Hanayome 2 – Capítulo final, la que considero debería de quedarse con Futaro es Nino. Seguida por Miku, Ichika, Yotsuba e Itsuki respectivamente. Pero, en caso de que quieran hacer esos finales como spin-off, el punto clave de partida creo que sería las vacaciones familiares, más específicamente el beso junto a la campana.