Una petición realizada por un usuario japonés en Change.org titulada “Men are not Wolves (Los hombres no son lobos)” fue abierta recientemente, solicitando a la editorial Shueisha y al departamento editorial de las revistas Shonen Jump que no califiquen el “abuso y/o acoso sexual” bajo la categoría de ecchi, puesto que esto minimiza este tipo de actos.
署名ページだけでも、読んでみてほしい。
「株式会社集英社: ぼくたちは/男子たちは 狼なんかじゃない。 少年ジャンプは「エロ」と「性暴力」の違いを区別してください。」 https://t.co/8Vztketdey @change_jpより
— シオリーヌ🩸大貫詩織 (@shiori_mw) August 18, 2020
Si bien esto podría ser calificado como una petición de categoría “SJW (Social Justice Warriors)”, en realidad en el idioma japonés siempre se ha calificado al acoso sexual (en todos sus niveles) como “ecchi”. Las palabras “エッチ (Ecchi)” y “エロ (Ero)” están muy vagamente definidas, incluso entre los propios japoneses. Cualquier personaje dando una nalgada a una chica es considerado ecchi, pero sigue siendo una forma de acoso, sin importar lo inocente o infantil que se haya descrito la intención.
Usuarios en redes coinciden en que será interesante ver el cómo podría afectar esta petición ante lo que será considerado como “ecchi” en un futuro. Algunas revistas de Shueisha tienen “Shounen (Joven)” en el título, sin embargo, el público promedio es mucho mayor, lo que demuestra que las obras eróticas funcionan. Lo único que tienen que hacer, según los usuarios, es calificarlo adecuadamente.
Continúa: “Si Shueisha es capaz de categorizar y separar correctamente las obras eróticas R-15, probablemente le irá incluso mejor a esos trabajos al evitar que se generen polémicas innecesarias. La forma en que el manga se distribuye digitalmente hoy en día hace que las obras para mayores se mezclen fácilmente con aquellas dirigidas a niños o adolescentes menores de quince años“.
En Japón hay todo tipo de acoso sexual. Muchos japoneses minimizan una nalgada o un toqueteo como “ecchi inofensivo”, algo que quedó demostrado con los hechos recientes del escritor de Act-Age, que fue arrestado por agredir sexualmente a dos chicas menores de edad. Comúnmente se suele leer la frase. “No soy tan malo, no es como si haya violado a alguien o tocado a un menor“. Lo anterior, según usuarios, demuestra lo deteriorada que está la definición del acoso en Japón.
Finalmente, la petición destaca algunos puntos interesantes, señalando que no busca boicotear a la editorial, sino que simplemente debe categorizarse correctamente su contenido. “Si vendemos sexo, por lo menos debemos etiquetarlo como tal y agregar una advertencia de contenido. Calificarlo simplemente como “Ecchi” no es suficiente“.
Finalmente, la petición (enlace) fue cerrada con 4,190 firmas recolectadas en un periodo de nueve días, y será enviada a la editorial próximamente.
Fuente: Twitter