Recientemente, un YouTuber extranjero ha desatado una ola de indignación en Japón al difundir un rumor completamente infundado y ofensivo. La responsable es Tasha K, una YouTuber americana afroamericana con más de 1.2 millones de suscriptores, quien afirmó en uno de sus videos que Japón estaba ofreciendo 10 millones de yenes a hombres afroamericanos por embarazar a mujeres japonesas, como una supuesta medida para combatir la disminución de la tasa de natalidad en el país. Este rumor, que rápidamente fue identificado como falso, ha generado una fuerte reacción, especialmente entre las mujeres japonesas.
En el video, Tasha K afirmó: «¡Hombres afroamericanos! Japón los necesita. Parece que quieren que tengan hijos aquí porque creen que los afroamericanos pueden tener muchos hijos. Todos los hombres negros deben venir a Japón y ‘embarazar’ a las mujeres japonesas para ayudar a frenar la disminución de la población». Estas declaraciones no solo son totalmente infundadas, sino que también perpetúan estereotipos racistas y alimentan la desinformación.
La respuesta en Japón fue inmediata. Mujeres japonesas de todas las edades expresaron su enojo y disgusto ante la frivolidad del video. «No es divertido ni gracioso, y no es algo con lo que se deba bromear», comentó una mujer de 30 años. «Para aquellos que realmente entienden la situación, esto es impactante y enfurecedor», agregó una mujer de 60 años. «Me gustaría que supiera más sobre Japón antes de hacer comentarios así», dijo una joven de 20 años.
A pesar de la avalancha de críticas que recibió el video después de su publicación en mayo de 2024, Tasha K no solo no se disculpó adecuadamente, sino que en agosto de 2024 lanzó otro video en el que intentó justificarse diciendo que “solo era una broma”. Sin embargo, en lugar de disculparse, sorprendió a muchos al contratacar a los japoneses que la criticaron, afirmando que “las críticas fueron muy tristes” y defendiendo su creencia en la religión japonesa, desafiando a sus críticos a “embarazar a mujeres” en lugar de atacarla.
Se ha especulado que Tasha K pudo haber malinterpretado una noticia publicada en mayo de 2024 por el gobierno surcoreano, en la que se anunciaba un subsidio de 100 millones de wones (aproximadamente 11 millones de yenes) por cada hijo nacido en Corea del Sur, lo que podría haber llevado a la YouTuber a confundir la información.
La indignación no se limitó solo a Japón. En redes sociales, muchos extranjeros también expresaron su desaprobación. Un usuario francés comentó: «Esto es simplemente una táctica para ganar más visualizaciones, pero fue demasiado lejos». Otro usuario de Tailandia agregó: «Estas declaraciones son racistas y completamente inaceptables».
Este incidente subraya el impacto negativo que puede tener la desinformación difundida por influencers en plataformas globales, especialmente cuando se tocan temas tan sensibles como la crisis de natalidad en Japón y la integración cultural. La polémica continúa, y muchos siguen cuestionando los límites de lo que se puede considerar una “broma” en la era digital.
Fuente: Yahoo! News Japan