Esta reseña sobre Karakai jouzu no Takagi-san 3 contiene spoilers. Si no has visto el capítulo, te recomendamos hacerlo y después regresar a leer la reseña.
Resumen del capítulo
No hay nada mejor que un abanico para librarse del calor, Nishikata y Takagi lo saben, solo que la segunda hace que el pobre niño termine echándole aire, aunque la cercanía a la que llegan los alivia a los dos. El béisbol es un deporte popular, muchos mangas han salido y Nishikata lee uno, por lo cual quiere imitar la bola desconcertante del protagonista, solo que Takagi lo ve y un nuevo desafío ocurre con el resultado esperado. Las tres amigas caminan y ven un gato atrapado, por lo cual inician la operación rescate de gato, para luego darse cuenta que no estaba atorado. La lluvia puede ser torrencial y un paraguas siempre viene bien, quien no tiene debe esperar que acabe o ir corriendo a su casa, Takagi lo olvidó y Nishikata fue hábil pidiendo uno prestado, pero a medio camino regresa por su “amiga”, que es más importante que su serie favorita.
Opinión del capítulo
Un capítulo normal, ya no han habido cosas tan extrañas al inicio del capítulo. Aun así me ha gustado mucho, sobre todo el subcapítulo final. A nivel general no hay mucho que decir, el ending se mantuvo del anterior capítulo. Lo otro es que al parecer están haciendo referencias a ciertas cosas del manga, a las portadas o cosas de ellos como adultos. Algo un tanto específico, entre la primera temporada y esta, si mal no estoy ha pasado algo de un año (en el tiempo de ellos) y si somos meticulosos, creo que podemos darnos cuenta que hay un sutil cambio de comportamiento entre ellos dos, pues no imagino al Nishikata de la primera temporada haciendo lo que hizo, también lo de Takagi, que al inicio era fastidiar porque le divertía y ahora va más allá de eso. Sin percatarnos tanto sí ha habido sutiles desarrollos.
Abanico
De esta parte solo puedo decir algo, las palabras son engañosas, su sentido puede abarcar más de lo que entendemos. Nishikata entendió que debía mover el borrador abanicando, pero no necesariamente. Takagi lo movió con el abanico y ganó, porque en ningún momento dijo que debía usar el viento. La frentona purificadora gana de nuevo y doble, pues eso le permitió acercarse a Nishikata. ¿Qué bonito es el amor de infancia, no?
Bola desconcertante
¿Quién no ama el béisbol? Yo no, pero Nishikata sí. Lo que hace me recuerda a lo que, seguramente, nosotros hicimos de niños, imitar algo que hemos visto. Y claro, que nos vean nos parecía vergonzoso, típico de niños, peor si es alguien que nos fastidiaba o que nos gustaba. En el caso de nuestro protagonista fue un dos por uno, su molestadora es la que le gusta. Lo más “raro” del capítulo fue el uso de la imaginación de Nishikata, que para ganarle se traslada a una competencia. Sabemos que Takagi gana y le pide el manga que lee como “castigo”, lo cual se conecta con algo que veremos en la última parte del capítulo.
Desconozco que capítulo del manga es esta parte, pero recordó a uno del manga donde ellos son adultos, pues pasa casi eso solo que en la televisión. Léanlo, no hay pierde.
Rescate de gato
Yukari, Mina y Sanae encuentran un gatito que está atorado, al final no lo estaba y cuando llegó la lluvia se salió. No hay mucho que decir sobre esta parte, es una escena típica de las tres amigas, donde sus personalidades se complementan, pero a la vez discrepan. Esto es un interludio para lo que veremos al final, lo cual para mí es el plato fuerte.
Lluvia
Algunas veces quisiera que en la zona donde vivo lloviera así, pero no. En resumen lo que pasa es que Nishikata se va a recoger un paraguas para irse a su casa, en la calle medita si Takagi llevó paraguas y decide regresar. Takagi se sorprende, se alegra mucho y se van juntos, dejando un hermoso visual final. Justo esta parte es la que me hace decir que Nishikata ha crecido, que no es el mismo que vimos en la primera temporada, al menos no en lo que respecta a Takagi, demostrando poco a poco sus sentimientos por ella, porque llega a admitir, ¡¡LLEGA A ADMITIR!!, que se preocupó por ella. Y la conexión que dije que hay es cuando Takagi le dice que sabe todo de él, porque le dijo que iba a perder el especial de su serie. Cuando se está enamorado, lo normal es querer conocer a la otra persona de manera más profunda, eso lo demuestra Takagi. Es algo bonito de sentir.
Un capítulo normal con un final más que purificador. Si tienen alguien así, aprécienla(o). ¿Qué pasará con la maestra de las bromas?