En Japón, un hombre ha sido acusado de incendiar su departamento y poner en riesgo a terceros. El sujeto, identificado como un adicto a realizar donaciones a streamers en vivo a través de una plataforma de transmisiones, comenzó gastando 80,000 yenes (más de 596 dólares), para terminar gastando más de 250,000 yenes (casi 1900 dólares) al mes.
En diciembre de 2021 se reportó un incendio en un departamento de madera de dos plantas en Tokio poco después de las 3 de la madrugada. El fuego fue extinguido rápidamente por los bomberos y un hombre fue rescatado desde la habitación en donde había comenzado el incendio. El sujeto, que fue identificado como un oficinista de 53 años de edad que vivía solo y estaba inconsciente al momento de ser rescatado, pudo recuperarse de sus lesiones. Ninguna otra persona fue afectada por el siniestro.
En su primer juicio realizado el pasado 24 de abril, el acusado de 53 años de edad admitió los cargos diciendo: «Creo que no hice nada malo». De hecho, la corte compartió la transcripción de los comentarios realizados durante el juicio, puesto que señalan que el sujeto incendió él mismo su habitación con la intención de suicidarse.
- ¿Cuándo empezó a utilizar la aplicación de transmisión en vivo?
- Alrededor de octubre de 2020.
- ¿Por qué empezó a utilizar estos servicios?
- Se hizo popular durante la pandemia de COVID-19, y yo tenía que permanecer en casa debido a que si salía a trabajar o a comer podría enfermarme. Estaba mirando en mi smartphone y me encontré con la aplicación.
- Antes de empezar a consumir transmisiones en vivo (streamers), ¿qué le producía ansiedad?
- Me preocupaba no poder dejar de utilizar la aplicación, y que eventualmente me quedaría sin dinero.
- ¿Se refiere a que no quería deber dinero?
- Eso, o no quería seguir viviendo si la deuda aumentaba. Mi situación solo empeoraba. Mis ingresos solo eran de alrededor de 250,000 yenes, pero pagaba unos 84,000 yenes de renta (incluyendo estacionamiento) y otros 37,000 yenes por servicios de teléfono (incluyendo los de mi ex-esposa y mi hijo). En los meses precios al incidente, gastaba alrededor de 80,000 yenes al mes en donaciones a streamers, y mis ahorros se fueron acabando.
- ¿Cómo gastaba el dinero en esa aplicación?
- Haciendo donaciones a la persona que estaba transmitiendo en vivo, y ocupaba cierta posición dependiendo cuanto dinero acumulara en donaciones. Prácticamente eso es el salario de la persona que transmite en vivo.
- ¿Y qué ganaba usted con estas donaciones?
- Hay un ranking interno entre los espectadores, así que si donas mucho, aparecerás mucho más arriba y la persona que transmite en vivo te mencionará constantemente. Para mí, eso era razón suficiente.
- Sin embargo, 80,000 yenes al meses realmente es bastante dinero, ¿no cree?
- Bueno, es que no hay límite en la cantidad de dinero que puedes donar.
- ¿No le preocupaba quedarse sin dinero?
- Cuando era joven tenía la oportunidad de trabajar tiempos extras, y dependiendo del mes, ganaba muchísimo dinero, así que tenía mucho dinero guardado para gastar en lo que fuera. Sin embargo, debido a la pandemia de COVID-19, el número de trabajos disponibles se vino abajo.
- Además de usted, otras nueve personas viven en el complejo de departamentos. Una mujer de 90 años está incapacitada, y no pudo moverse incluso después de notar el incendio. ¿No pensó en eso antes de decidir incendiar su habitación?
- Lo siento mucho, pero estaba muy centrado en suicidarme que realmente no pensaba en otra cosa.
- Hay muchas formas de cometer suicidio, ¿por qué decidiría quemarse vivo?
- Tenía algunas posesiones que no quería que los demás vieran. Un incendio acabaría con todo.
- ¿Puede ser más específico? ¿Qué clase de posesiones?
- Un DVD.
- ¿Se refiere a una película pornográfica?
- Así es.
- ¿Por qué le preocuparía?
- No quiero que mis padres lo sepan.
En el momento del siniestro, la anciana madre del acusado estaba sola cuidado de su padre, que está en silla de ruedas, y de su hermano, que sufre una grave discapacidad mental. Aunque en la habitación del demandado solo se quemó una parte del suelo (menos de un metro cuadrado), las paredes y las puertas se quemaron y el cristal de la ventana se rompió, lo que implicó gastos de 6 millones de yenes en reparaciones (alrededor de 45 mil dólares).
Sin embargo, el propietario no presentó cargos por ninguno de los daños. Según la acusación, la mayor parte de los gastos de reparación fueron cubiertos por el seguro y la madre del acusado pagó la mudanza de sus bienes. Además, ella consideraba que él la estaba pasando mal, considerando que había perdido a su familia y no le quedaba nadie en su vida.
La madre del acusado, que compareció como testigo, pidió disculpas a los residentes y al propietario, y expresó sus comentarios sobre su hijo. La fiscalía pedía una pena de cinco años de prisión, y el sujeto terminó siendo condenado a tres años de prisión y una pena suspendida de cinco años (es decir, que solo será efectiva si comete otro delito). El Tribunal del Distrito de Tokio condenó los hechos, declarando: «No se puede negar que existía la posibilidad de una catástrofe que puso en peligro la vida de los residentes del edificio y la propiedad material del dueño. Sin embargo, la soledad provocada por la pandemia de COVID-19, la sensación de vacío que intentó llenar con streamers en línea y la vaga ansiedad por la disminución de sus ingresos, se comprenden como causas probables de sus acciones».
Fuente: Livedoor News