La decisión tomada por la plataforma OnlyFans de dejar de alojar próximamente una amplia franja de contenido sexualmente explícito está provocando una gran conmoción en Internet. OnlyFans, un sitio web con 130 millones de usuarios y más de 2 millones de creadores de contenidos, se ha convertido en sinónimo de pornografía.
Para muchos la participación en esta aplicación se convierte en un salvavidas económico: algunos de los que perdieron sus empleos durante la pandemia recurrieron a vender sus cuerpos a través de esta plataforma para ayudar a pagar las facturas. Por el lado de la cultura otaku, miles de cosplayers venden sus paquetes de fotografías (tanto sencillas como eróticas) a través de OnlyFans, siendo esto último la razón por la que publicamos sobre esto en este sitio.
La empresa seguirá permitiendo algunas publicaciones que contengan desnudos, pero se prohibirá “cualquier contenido que contenga una conducta sexualmente explícita“, y el sitio se centrará en cambio en contenidos más convencionales. OnlyFans ha declarado que la prohibición, que entrará en vigor en octubre, se debe a la presión ejercida por los bancos y los procesadores de pagos, que han expresado su preocupación por el material que alberga. En lugar de perder su capacidad de aceptar pagos, lo que acabaría con el negocio, OnlyFans ha optado por prohibir el material para adultos que le dio fama.
¿A poco no te suena conocido eso último? Resulta que los problemas con los procesadores de pagos no han sido exclusivos de OnlyFans, puesto que a inicios de julio reportamos que Toffer Team se había quedado sin los fondos conseguidos en Kickstarter para producir “Lewd Idol Project“. Según la declaración emitida por el equipo de desarrollo, PayPal bloqueó sus fondos debido a que “estaban relacionados con actividades y servicios sexuales“, algo que no suena muy distinto a lo que está ocurriendo hoy con OnlyFans.
Sin embargo, OnlyFans también se ha enfrentado a un creciente escrutinio político y normativo sobre su capacidad para eliminar material ilegal y de explotación. A principios de este mes, más de un centenar de congresistas estadounidenses exigieron una investigación del Departamento de Justicia sobre OnlyFans, en relación con la supuesta presencia de material de menores en el sitio. Estos problemas han ahuyentado a los posibles inversores de la empresa y la han llevado a buscar un modelo de negocio más generalizado, similar al de otros sitios de crowdfunding como Patreon, al tiempo que han eliminado a los trabajadores del sexo que construyeron su audiencia.
Fuente: CNN Business
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