Una opinión compartida en un foro anónimo japonés se ha vuelto viral, generando un extenso debate entre los fanáticos del anime. El autor del mensaje, un autoproclamado otaku con más de 20 años de experiencia, expresó su descontento con las tendencias actuales de la industria, calificando las obras recientes como “sin dirección” y “rehash de versiones inferiores de éxitos pasados”:
- ¿Es que el anime de hoy se ha vuelto aburrido, o soy yo quien se ha vuelto aburrido?
- He sido un otaku del anime durante más de 20 años, pero últimamente los animes realmente me parecen aburridos.
- Obras sin un eje claro, donde no se entiende de qué trata el tema.
- Obras que, aunque tienen un tema, parecen insignificantes en comparación con la magnitud del mundo que presentan.
- Remakes deteriorados de animes clásicos que ya marcaron su paso en el pasado.
- Obras que parecen gritar que basta con enganchar al espectador momentáneamente o volverse virales para ganar.
- Obras predecibles, creadas con esfuerzos limitados y un presupuesto ajustado.
- Obras que terminan fragmentadas por escuchar demasiado las exigencias de los patrocinadores.
- Estoy cansado de este tipo de cosas. En una época en la que Japón como país tenía más vitalidad, siento que abundaban los animes experimentales y las obras más cercanas a la literatura. Hoy en día, cuando se decide crear un nuevo anime, parece que el único objetivo es simplemente que sea rentable. El deseo de sorprender al público o de crear una obra apasionada ha sido consumido por el agotamiento laboral, y en esta época moderna, con la falta de personal, ya no aparecen obras extrañas y arriesgadas hechas con un espíritu de “todo o nada”.
- Aunque los datos del pasado permiten saber qué es lo que vende, el hecho de centrarse únicamente en eso ha llevado incluso a los animes más clásicos a caer. Se debería aprender de los mangas, que son a menudo la fuente del material, que el éxito comercial debe ser solo un resultado, no el propósito principal. Pero esta industria japonesa de anime, ahora completamente complaciente, evita los riesgos. Dependen de las secuelas de obras pasadas para sacar dinero a los adultos mayores, o confían en otras franquicias o en directores famosos.
- El problema no es solo que se hayan vuelto complacientes, sino que los patrocinadores no aprenden de sus errores. Esto lleva a los creadores a rendirse, haciendo obras que solo cumplen con el presupuesto que les han dado, sin más aspiraciones. Y esta absurda espiral se agrava porque los espectadores siguen participando en ella. Quiero regresar a esa época donde cada minuto y cada segundo de un anime podía impactarme.
El mensaje generó respuestas en el foro, con posturas diversas. Mientras algunos coincidían con la opinión original, otros defendieron la calidad de las obras actuales, señalando que la percepción de aburrimiento podría deberse más al desgaste personal del espectador que a una falta de creatividad en la industria.
- «Es verdad. Pero el número de producciones de anime ha aumentado, y parece que muchas están hechas para llenar un catálogo en lugar de buscar calidad».
- «El público también tiene parte de la culpa. La gente se conforma con cualquier cosa que sea medianamente entretenida y no exige nada más».
- «Creo que simplemente te estás haciendo mayor. Los adolescentes actuales disfrutan mucho de estos animes ‘complacientes’ porque están hechos para ellos, no para veteranos como nosotros».
- «Me pregunto si esta persona vio algo esta temporada. Hay animes buenos si sabes buscar. Quizá no los ves porque estás sesgado».
- «El autor de este post tiene razón sobre los remakes y las secuelas. Muchas obras clásicas han perdido su esencia porque intentan monetizarlas para las nuevas generaciones».
- «Siento que antes había más pasión en la industria. Hoy, la obsesión por los beneficios mata cualquier atisbo de creatividad».
- «Los tiempos han cambiado. En los 80 y 90, los estudios se arriesgaban más porque los patrocinadores estaban dispuestos a apostar. Ahora no hay margen para el fracaso».
- «El problema principal es la sobresaturación. Hay tanto anime que es difícil encontrar algo que realmente destaque».
- «La nostalgia juega un papel aquí. Seguro que en 10 años alguien dirá que los animes de 2024 eran mejores que los de 2034».
- «Algunos animes de esta temporada me parecieron geniales, pero entiendo que hay una falta de ambición en general. Se siente todo muy genérico».
Fuente: Yaraon!
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