La idea de eyacular sobre una figura de anime de plástico es cada vez más popular entre la comunidad de Internet. Se trata de un fetiche aprendido (es decir, no naces queriendo “cumear” figuritas), surgido de la infinidad del ciberespacio y de la implacable curiosidad de la química cerebral masculina. Un hombre va experimentando distintos niveles de perversión y las leyendas más esotéricas de la masturbación, hasta finalmente caer hacia lo más bajo.
Ya lo mencionó un joven de 23 años a la MEL Magazine: «Estaba navegando por la parte NSFW de Reddit y me encontré con r/cummingonfigurines. Al principio me pareció muy raro, pero unos días después me aburría, así que tomé una de mis figuras y, bueno, le eyaculé encima. Algo en ver la figura chorreando ‘eso’ era muy erótico. Lo publiqué y recibí comentarios positivos».
¿Y cuál es el contexto? Dentro de la gran industria del merchandising hentai, puedes comprar pequeñas esculturas pintadas de varias chicas de anime tetonas, normalmente con la temática de las series que están arrasando en las listas de Crunchyroll. Estas figuritas pueden utilizarse como tótems para tus esfuerzos de simpatía parasocial, porque quizá no haya mejor forma de demostrar tu lealtad a, por ejemplo, Ryuko Matoi de Kill La Kill que apilar un estante con el rostro del personaje en una serie de formas inmodestas. Pero los más dedicados llevan sus homenajes un paso más allá, ofreciendo su semilla directamente al plástico.
Pero bueno, ¿por qué explicamos todo esto? Pues en un popular grupo de Facebook un usuario reveló que había comprado una figuras de segunda mano de Itsuki Nakano de Gotoubun no Hanayome, pero que desafortunadamente “venía cumeada“. Revisemos la declaración de este sujeto:
- Banda, nunca compren figura de segunda mano. Ya he gastado mucho en mi colección de Itsukis y dije: “Bueno, esta figura no me gusta tanto, voy a buscar una de esas de caja abierta, pero que están sin usar”. Encontré esta en una subasta en eBay y decía que la figura estaba en perfecto estado y tenía su caja. Me dije: “Bueno, lo que me ahorre lo gasto en otra figura”.
- La pedí y todo bien hasta que la saqué y venía con sorpresa. Unas manchas blanquecinas y extrañas venían por toda la figura, no me había dado cuenta hasta que la examiné detalladamente. Ya le di un jabonazo, pero no sé si dejármela sabiendo que otra persona ya la estrenó. ¿Qué harían ustedes en estos casos?
Y por supuesto, esto no pasó desapercibido por la comunidad:
- «Todas las Miku que he comprado por eBay hasta el momento no me han salido extrañas, pero antes había visto un video de un reparador de figuras y con una luz ultravioleta veía una figura de las Bycute Bunny y toda la figura brillaba de que le habían practicado cochinadas. A veces hay que gastar más para tener algo seguro».
- «Revísalas con luz ultravioleta y deja de andar alucinando».
- «Si ya sabes como son los fans de las quintillizas, para qué vas a comprar figuras de segunda mano».
- «¿Para que compras en eBay? Compra en AmiAmi, Solaris, Mandarake o Buyee si es para figuras de segunda mano».
- «En el ojo, que buena puntería».
- «¿No usaste luz ultravioleta para ver detenidamente esas partes y limpiarla más a fondo? Luego no se sabe hasta en que lugar le echaron hijos».
- «Una desinfectada y bañada en cloro y listo. Es como cualquier producto que hayan usado de mal manera una reparada y queda como nuevo».
- «No, no te daré el reembolso».
- «Como siempre, lo barato sale caro».
- «Perdón, es que ese día se me fue el Internet».
Fuente: Facebook